viernes, 2 de noviembre de 2012

NO ES FÁCIL, PERO ES POSIBLE SER BUENOS EJEMPLOS





Los miembros de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días son responsables de dar siempre un buen ejemplo a los demás. Esto no siempre es fácil, todo lo contrario, pero es posible si ponemos al Señor siempre en primer lugar en nuestras vidas.

http://youtu.be/1Wcoud9um7A



miércoles, 31 de octubre de 2012

FIN DE LOS CENTROS JA


Desde finales del pasado mes de Julio, la Primera Presidencia puso fin a los Centros de Jóvenes Adultos en todo el mundo. 
Ahora la organización de los JAS pasa a llamarse PROGRAMA JAS DE ESTACA (O DISTRITO, según sea el caso).

Existen pocas diferencias entre los antiguos Centros para Jóvenes Adultos y el Programa de Jóvenes Adultos Solteros de Estaca (o Distrito), siendo una de ellas que a los Centros podían acudir los Jóvenes Adultos casados pero sin hijos, mientras que el nuevo Programa se centra sólo en los Solteros.

Este "nuevo" Programa de los Jóvenes Adultos Solteros contempla que estos jóvenes sigan adelante con sus Actividades, sus Noches de Hogar, sus clases de Instituto, etc. Y decimos "nuevo" entre comillas porque en realidad se vuelve a la antigua organización de los JAS, la cual viene documentada en el Manual 2 de Instrucciones.

Los principales objetivos del Programa JAS son :
. Aprendizaje del Evangelio, haciendo énfasis  en los Cursos  de Instituto de Religión.
. Obra Misional
. Reactivación
. Liderazgo
. Actividades
. Historia Familiar y Templo

En la Rama de Ferrol, desde finales de Julio hasta la fecha, tanto los líderes adultos como los JAS se estuvieron adaptando a los cambios del Programa JAS de Distrito, sin parar de hacer sus Actividades, por lo que en realidad, aparte de unos pequeños detalles, todo parece seguir como antes del cambio.

Aprovechamos desde este Blog para animar a todos los JAS de Ferrol a que vengan  LOS MARTES A LAS 19H00 a la Rama para participar en las actividades.

 





jueves, 13 de septiembre de 2012

LECCIÓN 15: PRESTÉMONOS SERVICIO LOS UNOS A LOS OTROS



Lección 15 EL EVANGELIO Y LA VIDA PRODUCTIVA

PRESTÉMONOS SERVICIO LOS UNOS A LOS OTROS

Las Escrituras y los siervos del Señor nos enseñan a prestarnos servicio los unos a los otros:
Mosíah 4:15 Les ensñaréis (a vuestros hijos) a amarse mutuamente, y a servirse el uno al otro.
D y C 81:5 De manera que sé fiel, ocupa el oficio al que te he nombrado: socorre a los débiles, levanta las manos caídas y fortalece las rodillas debilitadas.
El Pte. Romney dijo: “Servir es, por los convenios que hemos hecho, una obligación de todos los miembros de la Iglesia. El Señor ha dicho en Mateo10:39 que el que halla su vida la perderá, y el que  pierde su vida por causa de  Él, la hallará. Perdemos nuestra vida sirviendo y edificando a otros, y al hacerlo, experimentamos la única verdadera y perdurable felicidad. El prestar servicio no es algo que hacemos en esta tierra para poder ganar el derecho de vivir en el reino celestial, sino que es la fibra misma de la cual está formada la exaltación en ese reino.”

En algún momento, todos necesitamos de ayuda:
El Élder Scott dijo: “Hoy día la vida puede ser tan complicada y las necesidades tan grandes que nos resulte imposible resolverlas solos. Todos necesitamos la ayuda del Señor.”
El Élder Ashton dijo: “Hay personas necesitadas en todas las edades. Algunas de Sus ovejas son jóvenes y se encuentran solas y perdidas. Otras están cansadas, afligidas y agotadas por los años. Algunas de ellas son de nuestra propia familia, o están entre nuestros vecinos, o en rincones alejados del mundo donde podemos ayudarlas por medio de nuestras ofrendas de ayuno. Algunas se están muriendo de hambre, otras se están muriendo por falta de amor e interés.”

Podemos prestarnos servicio de diferentes modos:
El Pte. Monson dijo: “Nuestro servicio al prójimo puede fortalecer el espíritu humano, vestir cuerpos con frío, alimentar al hambriento, consolar a los acongojados y elevar almas preciosas a nuevas alturas.”
Mateo 25: 35-40: Porque tuve hambre, y me disteis de comer, tuve sed y me disteis de beber, fui forastero y me recogisteis, estuve desnudo y me cubristeis, enfermo y me visitasteis, en la cárcel, y vinisteis a mí…Y respondiendo el Rey les dirá: De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis.

El prestarnos servicio mutuo debe ser un objetivo que dure toda la vida:
Mosíah 2:17 Y he aquí, os digo estas cosas para que aprendáis sabiduría, para que sepáis que cuando os halláis al servicio de vuestros semejantes, sólo estáis al servicio de vuestro Dios.
D y C 4:2 Por tanto, oh vosotros que os embarcáis en el servicio de Dios, mirad que le sirváis con todo vuestro corazón, alma, mente y fuerza para que aparezcáis sin culpa ante Dios en el último día.
El élder Taylor dijo: “El prestar servicio al prójimo los conducirá hacia las ventanas de la vida y no hacia los espejos que sólo reflejen la imagen de ustedes mismos.”
El Élder Romney dijo: “Si sabemos que ayudar a otros satisface a nuestro Padre Celestial y deseamos estar dónde Él está y ser lo que Él es, ¿por qué se nos debe dar el mandamiento de que nos sirvamos los unos a los otros? ¡Bendito sea el glorioso día en que todas estas cosas surjan en forma espontánea debido a la pureza de nuestro corazón! Ese día no habrá necesidad de un mandamiento, porque todos habremos aprendido ya que la verdadera felicidad se obtiene solamente cuando se está embarcado en un servicio generoso y altruista. Usemos la libertad que proviene de la autosuficiencia, al dar y al servir.”

LECCIÓN 14: HONREMOS LOS CONVENIOS



Lección 14 EL EVANGELIO Y LA VIDA PRODUCTIVA

HONREMOS LOS CONVENIOS

Un convenio es una promesa sagrada entre Dios y Sus hijos:
Los Santos de los Últimos Días son un pueblo que hace convenios. Los principios y las ordenanzas se reciben mediante convenios. Los miembros de la Iglesia que hacen estos convenios prometen honrarlos. Por ejemplo, en el bautismo, los miembros hacen convenio con el Señor y al participar de la Santa Cena los renuevan.
En el templo se hacen convenios adicionales. El pueblo del Señor es el pueblo del convenio.

Al honrar nuestros convenios nos es posible alcanzar nuestro potencial divino:
El Élder Russell M. Nelson dijo: “Con cada ordenanza se hace un convenio o una promesa. Un convenio que se hace con Dios no es una restricción sino una protección. Ese concepto no es nuevo. Por ejemplo, si el suministro de agua que recibimos no es puro, la filtramos para eliminar los elementos dañinos. Los convenios divinos nos sirven para filtrar y eliminar de nuestra mente las impurezas que podrían hacernos daño. Si escogemos abstenernos de toda impiedad no perderemos nada de valor y obtenemos la gloria de la vida eterna. Los convenios no nos limitan, nos elevan más allá de los límites de nuestro propio poder y perspectiva.”
El Pte. James Faust dijo:
“Para que puedan alcanzar todo su potencial precisarán honrar en la vida 4 principios sagrados que son:
1. Reverencia por la Deidad
2. Respetar y honrar los lazos familiares
3. Reverencia y obediencia a las ordenanzas y a los convenios del santo sacerdocio
4. Respeto por ustedes mismos como hijos de Dios.”

La autoridad del sacerdocio es necesaria para recibir los convenios y las ordenanzas de salvación:
El sacerdocio es el poder más grande que hay sobre la tierra.
Mateo 16: 15-19  “ Y a ti te daré las llaves del reino de los cielos, y todo lo que atares en la tierra será atado en los cielos; y todo lo que desatares en  la tierra será desatado en los cielos.”

El honrar nuestros convenios nos prepara para recibir la vida eterna:
D y C 6: 37 “…sed fieles, guardad mis mandamientos y heredaréis la vida eterna.”
El Élder Russell M. Nelson dijo: Las ordenanzas, los convenios, la investidura y los sellamientos del templo permiten a las personas reconciliarse con el Señor y a las familias ser selladas más allá del velo de la muerte. La obediencia a los convenios del templo nos hace merecedores de la vida eterna, el mayor de todos los dones de Dios al hombre. La vida eterna es más que la inmortalidad. La vida eterna es la exaltación en el cielo más alto, la clase de vida que vive Dios.”


LECCIÓN 13: "ESTAS COSAS TE SERVIRÁN DE EXPERIENCIA"



Lección 13 EL EVANGELIO Y LA VIDA PRODUCTIVA

“ESTAS COSAS TE SERVIRÁN DE EXPERIENCIA”
Dy C 122: 7 “si eres echado en el foso o en manos de homicidas, y eres condenado a muerte; si eres arrojado al abismo; si las bravas olas conspiran contra ti; si el viento huracanado se hace tu enemigo; si los cielos se ennegrecen y todos los elementos se combinan para obstruir la vía; y sobre todo, si las puertas mismas del infierno se abren de par en par para tragarte, entiende, hijo mío, que todas estas cosas te servirán de experiencia, y serán para tu bien.”

La adversidad es parte de nuestra experiencia terrenal:
2 Nefi 2:11: Porque es preciso que haya una oposición en todas las cosas.”
El Élder Neal A. Maxwell dijo: “La vida terrenal nos ofrece innumerables oportunidades de llegar a ser más semejantes a Cristo: primero, al tener que hacer frente satisfactoriamente a esas dificultades de la ida que son humanas. Segundo, al sufrir nuestras tribulaciones individuales tales como las enfermedades, la soledad, las persecuciones, las traiciones, las contradicciones, la pobreza, la calumnia, el amor no correspondido, etc.”

Los desafíos de la vida terrenal nos ayudan a progresar:
Cualquier progreso que hayamos conseguido en esta vida proviene siempre de una dificultad que se logró vencer previamente. El Élder Richard Scott dijo: “En el preciso momento en que todo parece ideal, a veces surgen simultáneamente múltiples dificultades. Si esas pruebas no son el resultado de tu desobediencia, son evidencia de que el Señor sabe que estás preparado para progresar más. Entonces te da experiencias que estimulen tu progreso, tu comprensión y compasión y que te refinen para tu bienestar eterno. Llegar de donde estás adonde Él quiere que estés exige un gran esfuerzo que generalmente va acompañado de pesar y dolor. Pero todo se te da siempre para tu bien.”

Guardar la fe en Jesucristo nos ayuda a resolver los problemas y a vencer la adversidad:
Si durante nuestras adversidades queremos recibir el consuelo del Señor, debemos primeramente ejercer nuestra fe.
El Élder Scott dijo: “Cuando te enfrentas a la adversidad, quizás tengas tendencia a hacerte las siguientes preguntas: ¿Por qué a mí? ¿Por qué tiene que pasarme esto? ¿Qué hice para merecerlo? Estas preguntas te llevarán siempre a un callejón sin salida, pues no es bueno hacer preguntas que impliquen oposición a la voluntad de Dios. Mejor es preguntar: ¿Qué debo hacer? ¿Qué puedo aprender de esta experiencia? ¿Qué puedo cambiar? ¿Cómo puedo recordar mis bendiciones en medio de esta prueba? La disposición a sacrificar los anhelos personales más profundos sometiéndose a la voluntad de Dios es muy difícil. Pero el pedir con verdadera convicción el querer saber cuál es Su voluntad, y decir `Hágase Tu voluntad´ es la mejor manera para recibir la máxima ayuda de nuestro amoroso Padre Celestial.”
    El Pte. Howard Hunter dijo: “¿Por qué queremos llevar nuestras cargas solos? o ¿por qué insistimos en cargarlas con un apoyo temporal que pronto se acaba? Para los que llevan una carga pesada, el yugo de Cristo, o sea, la fortaleza y la paz que se obtienen luchando al lado de Dios, es lo que dará el apoyo, el equilibrio y la fortaleza para vencer las dificultades que se presenten, y para soportar lo que se requiera de ellos en esta difícil vida mortal.”

Debemos perseverar hasta el fin:
D y C 24: 8: “Sé paciente en las aflicciones, porque tendrás muchas; pero sopórtalas, pues he aquí, estoy contigo hasta el fin de tus días.”
El Élder Joseph Wirthlin dijo: “Los miembros fieles de la Iglesia deben ser como los robles y extender sus raíces en la tierra fértil de los principios fundamentales del Evangelio: debemos entender las verdades básicas y sencillas y vivir de acuerdo con ellas, sin complicarlas. Nuestro fundamento debe ser sólido y de raíces profundas a fin de resistir los vientos de las tentaciones, de las doctrinas falsas y de los ataques del adversario, sin vacilar y sin ser arrancados de cuajo.”

domingo, 26 de agosto de 2012

EL SACERDOCIO



(Artículo sacado de "Mormones online")
Los hombres santos de los últimos días, así como las mujeres,   tienen una función específica que cumplir en el hogar y en la iglesia.
Dentro de la iglesia, los hombres pueden poseer el sacerdocio. Éste no es como el sacerdocio de la Iglesia Católica, o muchas otras religiones. La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, que es el verdadero nombre de la Iglesia, es una iglesia laica; no hay ministros pagados. Todos son voluntarios. Además, todos los varones de doce años de edad o mayores que viven una vida moralmente limpia, pueden poseer el sacerdocio.
Es importante señalar que los hombres no pueden usar su sacerdocio en sí mismos. Si necesitan algo que se hace normalmente a través del sacerdocio, ellos, al igual que las mujeres, deben encontrar otros poseedores del sacerdocio que lo hagan a favor de ellos. 
El sacerdocio es una posición de servicio, lo que les permite servir a los demás, pero no a sí mismos. Esto significa que no hay ningún beneficio especial en poseer el sacerdocio aparte de las oportunidades que ofrece para servir; no hace más fácil para ellos el lograr la salvación. 
Las mujeres tienen otras responsabilidades y oportunidades. Los puestos ocupados por los hombres no son más importantes que los de las mujeres. Simplemente son diferentes.
Cada miembro de la Iglesia recibe las bendiciones del sacerdocio. Ninguna bendición que un poseedor del sacerdocio pueda darle a alguien es retenida de aquellos que no la tienen por sí mismos. Cada nivel de sacerdocio viene con responsabilidades diferentes y cada persona puede hacer la labor de los niveles inferiores, así como la labor de su propio nivel.
Los poseedores del sacerdocio preparan y bendicen el sacramento (similar a la comunión en otras iglesias), restauran la salud a los enfermos, cuidan de los necesitados, visitan familias y se aseguran de su bienestar, y ocupan ciertas posiciones que requieren el sacerdocio.
Los hombres utilizan su sacerdocio para presidir el hogar. Esto no significa que ellos manden. El élder Bruce C. Hafen y su esposa Marie escribieron un artículo que explica este concepto. Ellos dijeron: En la versión en inglés de “Génesis 3:16 dice que Adán “gobernará sobre” de Eva, pero esto no hace que Adán sea un dictador. Para gobernar hay que establecer normas. Entonces Adán tendría que vivir de tal modo que otros puedan medir la rectitud de su conducta al observar la de él. Ser un gobernante no es tanto un privilegio de poder como una obligación de practicar lo que un hombre predica. Además, sobre en “gobernar sobre”, utiliza el término hebreo bet, que significa gobernar con, no gobernar sobre. Si un hombre ejerce “dominio… en cualquier grado de injusticia” (D. y C. 121:37; énfasis añadido), Dios termina el sacerdocio o autoridad de tal hombre”.
A los hombres se les enseña que sus esposas deben ser socias de pleno derecho en la dirección de la familia. El hombre sólo tiene una mayor responsabilidad en ver que él dé el ejemplo y el tono que la familia pueda seguir. Si el esposo y la esposa se encontraran en un punto muerto sobre una decisión importante, se les aconsejará orar pidiendo orientación. Si aún así no pudieran llegar a un acuerdo, el marido, en su papel de presidente, no es que automáticamente se salga con la suya. Él tendría la gran responsabilidad de elegir qué opción regirá. Por ejemplo, podría decidir que el problema está más en el área de responsabilidad de su esposa, y entonces ella podría tomar la decisión final y él la apoyaría tan completamente como si fuera su propia idea. Esto requiere que el poseedor del sacerdocio tenga una gran madurez, y los hombres están capacitados para desarrollar esa madurez.
Aunque los hombres y las mujeres tienen diferentes responsabilidades en un hogar mormón, ningún papel es más importante que el otro. Se espera que el esposo obtenga los ingresos de la familia, y la mujer, si es posible, cuide de la casa y los niños. Por supuesto, los hombres mormones ayudan con los quehaceres de la casa y los niños, y se espera que ayuden con alegría con la cocina y los pañales, pero es de dominio especial de la mujer.
Las mujeres mormonas no sienten que este papel las degrada en modo alguno. Debido a que las familias mormonas pueden ser eternas, el trabajo de la madre de edificar hijos responsables, llenos de fe, que sean buenos participantes en el mundo es fundamental para el bienestar eterno de la familia. El papel del padre es igual de importante, en hacer todo lo posible para asegurarse de que su familia esté cuidada y tenga un ambiente espiritual adecuado en el cual crecer y prosperar. Cuando cada miembro de la familia tiene áreas específicas de responsabilidad, esto ayuda a prevenir la contención, ya que cada padre es considerado el experto en su campo.
La iglesia considera que el papel de un padre es tan esencial para el bienestar de un niño como lo es el papel de una madre. A los hombres se les enseña a un tiempo bueno y de calidad con sus hijos y ayudar en su cuidado.
En general, la vida de un hombre mormón es una vida de ejemplo y responsabilidad.




EL VALOR DEL SER HUMANO


Una parábola moderna del valor que tiene el ser humano para Jesucristo, el Gran Maestro.
Enseña hermosamente cómo el sacrificio de Cristo puede ayudarnos a ser limpios.
La mano del maestro puede hacer la diferencia en la vida de cualquier persona.


http://youtu.be/Qw9sdJaE1_U

 


LECCIÓN 12: EL OBSERVAR LAS LEYES DE LA SALUD FÍSICA




Lección 12 EL EVANGELIO Y LA VIDA PRODUCTIVA

EL OBSERVAR LAS LEYES DE LA SALUD FÍSICA

Los buenos hábitos de salud son importantes para vivir el Evangelio:
El mandamiento conocido como La Palabra de Sabiduría, relacionado con la salud y los alimentos recomendados para nuestro organismo se encuentra en D y C 89.
D y C 93: 35 “ …el hombre es el tabernáculo de Dios, a saber, templos; y el templo que fuere profanado, Dios lo destruirá.”
El Pte. Monson dijo: “El apóstol Pablo dijo: `¿No sabéis que sois templo de Dios, y que el Espíritu de Dios mora en vosotros? … el templo de Dios, el cual sois vosotros, santo es.´ (1 Corintios 3: 16-17). Así como las comidas nutritivas, el ejercicio en forma regular y el descanso apropiado vigorizan el cuerpo; el estudio constante de las Escrituras y la oración fortalecen la mente y el espíritu.”

La Palabra de Sabiduría es una parte importante de la ley del Señor sobre la salud:
El Pte. Gordon B. Hinckley dijo: “No consideren la Palabra de Sabiduría como un asunto trivial. En mi opinión, es el documento más extraordinario que conozco acerca de la salud. El profeta José Smith la recibió en el año 1833, cuando se sabía relativamente muy poco de cuestiones dietéticas. Ahora, cuanto más se avanza la investigación científica, más pruebas hay de los principios de la Palabra de Sabiduría.”

Una dieta adecuada, el descanso y el ejercicio proporcionan beneficios significativos en la salud:
D y C 88: 124 “Cesad de ser ociosos, cesad de ser impuros, cesad de criticaros el uno al otro; cesad de dormir más de lo necesario; acostaos temprano para que no os fatiguéis;  levantaos temprano para que vuestros cuerpos y vuestras mentes sean vigorizados.”

Debemos evitar las sustancias y las prácticas que dañan el cuerpo y la mente:
D y C 89: 4: “ He aquí, de cierto, así dice el Señor: Por motivo de las maldades y designios que existen y que existirán en el corazón de hombres conspiradores en los últimos días, os he amonestado y os prevengo, dándoos esta palabra de sabiduría por revelación.”
El Élder Russell M. Nelson dijo: “De un simple experimento considerado inofensivo puede desencadenarse un serio vicio. De las pruebas emergen los hábitos,  de los hábitos sale la dependencia; de la dependencia resulta la adicción. Sus cadenas pesan sobre la persona en forma gradual, y sus eslabones esclavizadores son demasiado pequeños para que se les perciba, hasta que llegan a ser demasiado fuertes para romperlos. Por cierto que las drogas son “el guiso” moderno por el cual se venden las almas. Ninguna familia está exenta de ese riesgo… La adicción a cualquier tipo de sustancia insana esclaviza no solamente al cuerpo físico, sino también al espíritu.”


viernes, 24 de agosto de 2012

EL SERVICIO




Ayudar a los demás es muy importante.
Como dice el Rey Benjamín en el Libro de Mormón ( Mosíah 2: 17):
Y he aquí, os digo estas cosas para que aprendáis asabiduría; para que sepáis que cuando os halláis al bservicio de vuestros csemejantes, sólo estáis al servicio de vuestro Dios".

Los jóvenes de la Estaca de Elche (España) en una visita al Templo de Madrid, nos hablan acerca de

la importancia de servir a los demás.


http://youtu.be/KEqAEH5m8Ps

Como miembros de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días debemos aprovechar todas las oportunidades que se nos presenten para ayudar a los demás, porque esa es la voluntad de nuestro Padre Celestial, que nos sirvamos y nos amemos los unos a los otros. 


sábado, 18 de agosto de 2012

LECCIÓN 11: ELEGIR Y SER UNA COMPAÑERA O UN COMPAÑERO ETERNO



Lección 11 EL EVANGELIO Y LA VIDA PRODUCTIVA

ELEGIR Y SER UNA COMPAÑERA O UN COMPAÑERO ETERNO

Un matrimonio logra florecer cuando esposo y esposa comparten valores e intereses similares:
El Élder Richard Scott dijo: “Los cimientos de un matrimonio eterno consisten en mucho más que una cara hermosa o una figura atractiva; es preciso tener en cuenta mucho más que la popularidad o la simpatía. Al buscar un compañero eterno, considera a alguien que esté cultivando los atributos esenciales que brindan felicidad: amor profundo por el Señor y por Sus mandamientos, determinación de obedecerlos, comprensión bondadosa, deseo de perdonar y disposición de dar de sí, el deseo de tener una familia con hijos y la determinación de enseñarles los principios de verdad en el hogar. Las decisiones correctas que tomes ahora te ayudarán a prepararte para ser sellado o sellada en el templo.”

Debemos prepararnos para ser los mejores compañeros posibles:
“…el matrimonio lo decretó Dios para el hombre.” (D y C 49:15)
El Élder Scott dijo: “El carácter digno se forja mejor con una vida de constantes elecciones correctas centradas en las enseñanzas del Maestro. El noviazgo puede ser una época maravillosamente hermosa de progresar y de compartir, una época en que debes concentrar tus pensamientos, acciones y planes en dos personas: los padres de tus futuros hijos. Prepárate para tener éxito como padre o madre siendo completamente digno en todo pensamiento y acto durante tu noviazgo.”

La proclamación sobre la familia es una guía para valorar nuestra actitud y la de nuestro futuro cónyuge:
El Élder Aldin Potter, de los Setenta, dijo: “Deseo sugerirles que un cuidadoso estudio de la proclamación sobre la familia les será de inmensa ayuda cuando comiencen a edificar un hogar y una familia. Pero si su futuro esposo o esposa no está de acuerdo con la doctrina que se enseña en ella, deben saber del peligro de comprometer su vida con esa persona.”

El esposo y la esposa tienen la solemne responsabilidad de amarse y cuidarse el uno al otro, y también a sus hijos:
El Élder Russell Ballard dijo: “Me maravilla el pensar en la gran confianza que Dios nos demuestra y que ha puesto en nosotros  al permitirnos el privilegio de ser los padres mortales de sus eternos hijos espirituales. Nunca debemos olvidar que Él tiene un interés muy especial en cada uno de nosotros y debemos darnos cuenta de la importancia de cada alma humana en el plan eterno de Dios. Cuando comprendemos esto, podemos ir con confianza ante Él en oración, a buscar Su guía y dirección en nuestra sagrada tarea como padres.
Él dijo: ´Porque he aquí, ésta es mi obra y mi gloria: Llevar a cabo la inmortalidad y la vida eterna del hombre.´(Moisés 1: 39) Me parece que en estas palabras se resume el importante papel que tenemos los padres en la vida eterna de cada miembro de nuestra familia.”

“Pero en el Señor, ni el varón es sin la mujer, ni la mujer sin el varón.” (1 Corintios 11:11)
El Pte. Hinckley dijo: “Cuando los años han pasado y los hijos han dejado el hogar uno a uno, los padres quedan solos otra vez. Pero juntos, se apoyan y se bendicen con lealtad sincera y felicidad. La muerte puede llegar en cualquier momento, pero debido a que fueron sellados en el templo y han vivido dignos de esas bendiciones, volverán a estar juntos, y esta vez,  para siempre.”


viernes, 3 de agosto de 2012

LECCIÓN 10: BUSCAR EL APRENDIZAJE POR MEDIO DEL ESTUDIO Y DE LA FE



Lección 10 EL EVANGELIO Y LA VIDA PRODUCTIVA

BUSCAR EL APRENDIZAJE POR MEDIO DEL ESTUDIO Y DE LA FE

El Señor enseñó que debemos “buscar conocimiento, tanto por el estudio como por la fe”:
D. y C. 88:118: “Y por cuanto no todos tienen fe, buscad diligentemente y enseñaos el uno al otro palabras de sabiduría; sí, buscad palabras de sabiduría de los mejores libros; buscad conocimiento, tanto por el estudio como por la fe.” Él nos bendecirá cuando busquemos conocimiento espiritual y secular. La educación es la clave para las oportunidades y debería convertirse en el empeño de toda una vida, ya que puede prepararnos para mantener a nuestra familia y permitirnos contribuir a la Iglesia y a la comunidad.

Debemos buscar conocimiento y sabiduría:
El Pte. Hinckley dijo: “Ustedes tendrán que hacer frente a los grandes retos del futuro. Están entrando en un mundo extremadamente competitivo; adquieran la mayor educación posible. El Señor nos ha exhortado en cuanto a la importancia de la educación: ésta los calificará para mayores oportunidades; los preparará para hacer algo que valga la pena en el gran mundo de oportunidades que se les presenta. Si pueden ir a la universidad y desean hacerlo, háganlo. Si no tienen el deseo de asistir a la universidad, entonces vayan a cursos vocacionales o de negocios para mejorar sus habilidades y aumentar su capacidad.”

El conocimiento espiritual es más importante que el conocimiento secular:
2 Nefi 9: 29 “ Pero bueno es ser instruido, si hacen caso de los consejos de Dios.”
El Élder Perry dijo: “Si proporcionamos un cimiento espiritual para nuestro conocimiento secular, no sólo entenderemos mejor las leyes de la naturaleza, sino que obtendremos una profundidad de conocimiento que jamás imaginamos que fuese posible sobre el arte, las lenguas, la tecnología, la medicina, el derecho y el comportamiento humano.”

La instrucción formal es la clave de la oportunidad:
“La gloria de Dios es la inteligencia, o en otras palabras, luz y verdad.” (D y C 93:36)
“Si estáis preparados, no temeréis.” (D y C 38:30)
El Pte. Hinckley dijo: “Me gustaría decirles a los jóvenes que cursen todos los estudios que puedan. Cultiven tanto las destrezas intelectuales como las manuales. La instrucción formal es la clave de la oportunidad. El Señor ha puesto sobre ustedes, como miembros de esta Iglesia, la obligación de estudiar y aprender las cosas espirituales, así como también las temporales. Adquieran toda la educación que les sea posible, aun cuando signifique un gran sacrificio mientras sean jóvenes. Ustedes bendecirán la vida de sus hijos y bendecirán la Iglesia ya que darán honra a esta obra.”

El Señor nos guiará en aquellos aspectos del aprendizaje que nos ayudarán a prestar mejor servicio a los demás:
La lectura diaria de las Escrituras y seguir siempre al Señor nos ayudará para recibir inspiración en todas nuestras decisiones: 2 Nefi 32: 5 “Porque si entráis por la senda y recibís al Espíritu Santo, él os mostrará todas las cosas que debéis hacer.”

El aprendizaje es un empeño de toda la vida:
D y C 130: 18-19 “Cualquier principio de inteligencia que logremos en esta vida se levantará con nosotros en la resurrección; y si en esta vida una persona adquiere más conocimiento e inteligencia que otra, por medio de su diligencia y obediencia, hasta ese grado le llevará la ventaja en el mundo venidero.” El aprendizaje no tiene fin. Nuestra educación nunca debe cesar. No debemos detener nuestra evolución, sino seguir aprendiendo toda la vida.


LECCIÓN 9: EL SER AUTOSUFICIENTE A LA MANERA DEL SEÑOR




Lección 9 EL EVANGELIO Y LA VIDA PRODUCTIVA

EL SER AUTOSUFICIENTE A LA MANERA DEL SEÑOR

La autosuficiencia recta abarca la  fe y la dependencia en el Salvador:
2 Nefi 4: 34-35: “ ¡Oh Señor, en ti he puesto mi confianza, y en ti confiaré para siempre!...Sí, sé que Dios dará libremente a quien pida.”
El Élder Joseph B. Wirthlind dijo: “Utilicen su inventiva, su fortaleza, su determinación para resolver sus dificultades. Hagan todo lo que puedan y dejen el resto para el Señor.”
El Pte. Howard Hunter dijo: “Si nuestra vida y nuestra fe se centran en Jesucristo y en su Evangelio, nada podrá ir permanentemente mal. Por otro lado, si nuestra vida no está centrada permanentemente en el Salvador ni en sus enseñanzas, nada podrá salirnos permanentemente bien.”

El Evangelio nos enseña a ser autosuficientes en forma temporal, a progresar espiritualmente y ayudar a los demás a hacer lo mismo:
El Pte. Kimball dijo: “El trabajo acarrea felicidad, autoestima y prosperidad. Es el medio para alcanzar todos los logros; es lo opuesto a la ociosidad y se nos ha mandado trabajar. Ningún fiel Santo de los Últimos Días que esté física o emocionalmente capacitado, cederá voluntariamente la carga de su propio bienestar o del de su familia a otra persona, sino que mientras pueda, bajo la inspiración del Señor y con sus propios esfuerzos, se sustentará a sí mismo y a su familia con las necesidades espirituales y temporales de la vida.”
Cuando cada uno haya logrado su autosuficiencia espiritual y temporal, entonces es cuando puede ayudar a los demás.

Tenemos la responsabilidad de tratar de progresar:
El Élder Russell M. Nelson dijo: “Hagamos todo lo que esté a nuestro alcance por tratar de mejorar cada día. Cuando surjan nuestras imperfecciones, continuemos corrigiéndolas; aprendamos a perdonar nuestros defectos y los de los que nos rodean; recibiremos consuelo y paciencia.”

La autosuficiencia implica el desarrollo de destrezas y habilidades en varios aspectos:
. Educación
Cuando tenemos conocimiento y sabiduría podemos discernir entre la verdad y el error y tomar mejores decisiones. Debemos esforzarnos en adquirir mayor conocimiento en todo lo que podamos.
. Salud
El Señor nos ha mandado conservar nuestro cuerpo en buen estado. Al hacerlo podemos satisfacer nuestras propias necesidades y prestar servicio a los demás.
. Trabajo o empleo
Cuando trabajamos honradamente podemos proveer para nuestras necesidades y las de nuestra familia, además de mejorar nuestras habilidades.
. Administración de las fuentes de recursos
Debemos ser mayordomos prudentes y ejercer un buen criterio al administrar y reabastecer las fuentes de recursos con las que el Señor nos ha bendecido.
. fortaleza espiritual, emocional y social
Debemos esforzarnos por vivir rectamente, desarrollar una buena relación con nuestra familia y con los que nos rodean, y por sentirnos satisfechos con nosotros mismos también.


miércoles, 25 de julio de 2012

LECCIÓN 8: CADA UNO DE NOSOTROS PUEDE AYUDAR A EDIFICAR EL REINO DE DIOS SOBRE LA TIERRA



Lección 8 EL EVANGELIO Y LA VIDA PRODUCTIVA

CADA UNO DE NOSOTROS PUEDE AYUDAR A EDIFICAR EL REINO DE DIOS SOBRE LA TIERRA

El Señor aconsejó en Mateo 6:33: “…no busquéis las cosas de este mundo, mas buscad primeramente edificar el reino de Dios, y establecer su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.”

Si vivimos con rectitud, ayudaremos a edificar el reino de Dios:
D y C 12: 6-7: “…Guarda mis mandamientos y procura sacar a luz y establecer la causa de Sión. He aquí, te hablo a ti y también a todos aquellos que tienen deseos de hacer salir a luz y establecer esta obra.”
El establecer el reino de Dios sobre la tierra ha sido el propósito de toda dispensación del Evangelio. El reino de Dios sobre la tierra es la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días y existe en cualquier lugar en que haya miembros de la Iglesia. Ayudamos a establecer el reino a medida que nos convertimos en puros de corazón viviendo rectamente ante el Señor obedeciendo los mandamientos y prestando servicio a nuestros semejantes.  Cada miembro de la Iglesia puede colaborar  de algún modo en la edificación del reino de Dios. El mejor lugar para ello es nuestro propio hogar, en el barrio/rama o en la estaca/distrito.  Cuando servimos al Señor, no importa dónde lo hagamos sino cómo lo hagamos. Estar anhelosamente consagrados a la obra del reino, a cualquier nivel, bendecirá nuestra vida y nos permitirá progresar espiritualmente.

Por medio de la actividad en la Iglesia, las personas y las familias se fortalecen:
Orando, leyendo regularmente las Escrituras,  cumpliendo sinceramente con sus llamamientos, viviendo el Evangelio en su esencia tanto en sus hogares como en la Iglesia, los miembros se edifican tanto de forma personal como en familias.
El Élder Robert L. Backman de los Setenta, dijo: “La actividad en la Iglesia será un ancla para ustedes como nada en la tierra, ya que les dará la oportunidad de descubrir el verdadero significado de la felicidad, les dará la seguridad de saber que son parte de algo, no importa donde vayan. Sabrán de la hermandad del Evangelio de Jesucristo, llegarán  a conocer al Señor como su Salvador y conservarán su testimonio ardiendo intensamente. Cuando hayan tomado la decisión de estar siempre activos en la Iglesia, el Señor les ayudará a guardar la Palabra de Sabiduría, permanecer moralmente puros, pagar el diezmo, estudiar el Evangelio, etc. y tendrán control sobre sus vidas, gozando de la paz y la tranquilidad que se obtienen al cumplir los mandamientos de Dios.”

Debemos estar dispuestos a servir dondequiera que nos encontremos:
Mosiáh 2: 17 “Y he aquí, os digo estas cosas para que aprendáis sabiduría; para que sepáis que cuando os halláis al servicio de vuestros semejantes, sólo estáis al servicio de vuestro Dios.”
El Élder Ballard dijo: “Todos los miembros pueden contribuir a la edificación del Reino de Dios sobre la tierra dando libremente de su tiempo, talentos y aptitudes. Ningún miembro de la Iglesia debe dejar pasar la oportunidad de ejercer su fe y sentir el espíritu que se logra por medio de un humilde sacrificio…”

A medida que prestemos servicio en el reino de Dios, recibiremos bendiciones:
D y C 4: 3-4 “De modo que si tenéis deseos de servir a Dios, sois llamados a la obra: pues he aquí, el campo blanco está ya para la siega; y he aquí, quien mete su hoz con su fuerza atesora para sí, de modo que no perece, sino que trae salvación a su alma.”
El Élder Derek A. Cuthbert de los Setenta dijo: “El servicio cambia a la gente, refina, purifica, nos brinda una perspectiva mayor y hace que seamos mejores. El servicio hace que miremos lo que tenemos a nuestro alrededor y no hacia nuestro interior. El servicio nos impulsa a considerar  las necesidades de otras personas antes que las nuestras. El servicio recto es la expresión de la verdadera caridad, tal como el Señor lo demostró...El servicio nos ayuda a vencer el egoísmo y el pecado y encauza nuestros deseos y energías, transformándolos en una actividad recta. Nos acerca más a Cristo, e incrementa nuestra espiritualidad ayudando a otras personas a hacer lo mismo.”


martes, 17 de julio de 2012

LECCIÓN 7: EL RECONOCER Y CULTIVAR LOS TALENTOS Y LAS APTITUDES



Lección 7 EL EVANGELIO Y LA VIDA PRODUCTIVA

EL RECONOCER Y CULTIVAR LOS TALENTOS Y LAS APTITUDES

Debido al desarrollo que adquirimos en la vida preterrenal, cada uno de nosotros vino a la tierra con una combinación única de talentos y aptitudes:
El Élder Bruce R. McConkie dijo: “Los espíritus de todos los hombres, cuando se encontraban en la Presencia Eterna, en la Preexistencia, desarrollaron aptitudes, talentos, capacidades y habilidades de todo tipo, clase y nivel. Durante ese largo lapso de tiempo, se formó una variedad infinita de talentos. Con el correr del tiempo, no hubo dos espíritus iguales. Mozart se convirtió en músico, Einstein centró su interés en las matemáticas, Miguel Ángel se concentró en la pintura… Cuando pasamos de la preexistencia a la vida terrenal, traemos con nosotros las características y los talentos que desarrollamos allí, aunque olvidamos lo que ha sucedido antes, porque estamos aquí en la tierra para ser probados. La capacidad y aptitudes de allí permanecen con nosotros aquí: retomamos el curso de nuestro progreso dónde lo dejamos cuando partimos de la vida premortal.”
DEBEMOS COMPARTIR NUESTROS TALENTOS CON LOS DEMÁS PORQUE EN EL PLAN DE DIOS NO EXISTE EL EGOÍSMO: DEBEMOS SIEMPRE AYUDAR A LOS DEMÁS.

Cuando confiamos en el Espíritu, el Señor nos ayuda a reconocer y a cultivar nuestros talentos y aptitudes, y debemos ESFORZARNOS en desarrollarlos:
D y C 46: 11-12: “ Porque no a todos se da cada uno de los dones; pues hay muchos dones, y a todo hombre le es dado un don por el Espíritu de Dios. A alguno le es dado uno y a otros otro, para que así todos se beneficien.”  (Mateo 25: 14-30: La Parábola de los Talentos)
El Élder Marvin J. Ashton dijo: “Una de las grandes tragedias de la vida ocurre cuando una persona se cataloga a sí misma como carente de talento y dones. Cuando estamos disgustados o desanimados debido a que nos vemos tan insignificantes, no sólo nosotros nos llenamos de tristeza, sino también Dios. Al creer que no tenemos dones, a  juzgar por nuestra estatura, inteligencia, calificaciones en los estudios, posesiones materiales, poder, posición social o apariencia exterior, no sólo somos injustos, sino también irrazonables… Pues el Señor nos ha dado a cada uno,  uno o más talentos y está en nosotros en descubrirlos  y desarrollarlos. Tengamos presente que fuimos creados a la imagen de Dios, que no hay nadie insignificante y que todos somos importantes para Él.”  También dijo: “Existen diversos tipos de dones. Algunos de los espirituales son: el don de preguntar, el de escuchar, el de oír y de emplear una voz suave y apacible, el don de poder llorar, el de evitar la contención, el de congeniar, el don de evitar repeticiones vanas, el de obrar con rectitud, el de no condenar, el de buscar la guía de Dios, el de ser un discípulo, el don de interesarse en los demás, el don de saber meditar, el don de orar, el de testificar con poder y el don de recibir el Espíritu Santo.”

El Señor nos ayudará a vencer nuestras dudas y temores a medida que busquemos Su ayuda para cultivar nuestros talentos y aptitudes:
Cualquier cosa que hagamos en esta vida tendrá eco en la eternidad.
Isaías 41:10 “No temas, porque yo estoy contigo; no desmayes porque soy tu Dios que te esfuerzo; siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia.”
El Élder Richard Scott dijo: “En muchos sentidos el mundo es como una jungla llena de peligros que pueden dañarte o mutilarte el cuerpo, esclavizarte o destruirte la mente, o diezmar tu moral. Se proyectó que la vida fuera un desafío, pero no para que fracases, sino para que triunfes por medio de vencer obstáculos. De todos los lados te enfrentas a decisiones difíciles pero vitales. Hay una serie de tentaciones, influencias destructivas y peligros disfrazados que ninguna otra generación ha afrontado. Aunque  te consideres fuerte, inteligente, o con muchos dones y talentos, nadie podrá evitar serios problemas si no buscas la ayuda del Señor. No te enfrentes solo al mundo. Confía en el Señor.”

miércoles, 11 de julio de 2012

LECCIÓN 6: EL PROVEER PARA UNO MISMO, PARA LA FAMILIA Y PARA OTRAS PERSONAS



Lección 6 EL EVANGELIO Y LA VIDA PRODUCTIVA

EL PROVEER PARA UNO MISMO, PARA LA FAMILIA Y PARA OTRAS PERSONAS

Lo temporal y lo espiritual están relacionados
Lo temporal está relacionado con el tiempo, la vida terrenal y con inquietudes seculares más que con lo espiritual o lo sagrado. Sin embargo, lo temporal y lo espiritual están muy relacionados.
D y C 29: 31-32: “ Porque por el poder de mi Espíritu las he creado, sí, todas las cosas, tanto espirituales como temporales, primero espirituales, en seguida temporales, que es el principio de mi obra; y además, primero temporales y en seguida espirituales, que es el fin de mi obra.”
D y C 29:34–35: “Por tanto, de cierto os digo que para mí todas las cosas son espirituales; y en ningún tiempo os he dado una ley que fuese temporal, ni a ningún hombre, ni a los hijos de los hombres, ni a Adán, vuestro padre, a quien yo creé…”
Por lo tanto, existe una diferencia entre las cosas o creaciones del Señor, las leyes y los mandamientos: Las cosas o creaciones del Señor fueron primeramente creadas  espiritualmente en la Preexistencia, y luego creadas o “nacidas” en el mundo físico de esta tierra. Mientras que las leyes y los mandamientos, aún pareciendo tener un concepto temporal, son siempre espirituales. Por ej: la ley del diezmo, aunque parezca un mandamiento temporal ya que se refiere a dinero o cosas materiales, es espiritual debido a que el que lo cumple, además de recibir bendiciones, progresa espiritualmente al despojarse por ejemplo del egoísmo, del materialismo, y al experimentar la ley del sacrificio.

Nuestras prioridades deben reflejar los principios del Evangelio
El Élder Dallin H. Oaks dijo: “Jesús enseñó del orden prioritario cuando dijo: -Por tanto, no busquéis las cosas de este mundo, mas buscad primeramente edificar el reino de Dios, y establecer su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. (Mateo 6. 38)- Buscar primeramente el reino de Dios significa dar prioridad absoluta a Dios y a su obra. La obra de Dios es llevar a cabo la vida eterna de Sus hijos y todo lo que eso conlleva en el nacimiento, la crianza, la enseñanza y el sellamiento de los hijos de nuestro Padre Celestial. Todo lo demás está más abajo en el orden de prioridades… Como alguien dijo: `Si no hemos escogido primeramente el reino de Dios, al final no importa lo que hayamos escogido en su lugar.´ Con respecto al orden de prioridades de las decisiones de gran importancia en nuestra vida (los estudios, el trabajo, el lugar de residencia, el cónyuge o la maternidad/paternidad) debemos preguntarnos cuál serán las consecuencias eternas de esas decisiones.”

El padre tiene la responsabilidad de proteger a su familia y de proveerle las cosas necesarias de la vida. La responsabilidad primordial de la madre es criar a sus hijos
El Pte. hinckley dijo: “ De los padres es la responsabilidad de estar a la cabeza de su familia. Eso no quiere decir que actúen como dictadores ni que ejerzan injusto dominio. Conlleva el mandato de que atiendan a las necesidades de su familia, las cuales son más que alimento, ropa y techo. Entre ellas se cuentan el dirigir y enseñar con rectitud, tanto por el ejemplo como enseñando la honradez, la integridad, el servicio y el respeto, ya que somos responsables de lo que hagamos en esta vida ante otros y ante Dios. Y de las madres es la responsabilidad de criar a los hijos en la luz y la verdad, los cuales son la mayor bendición recibida del Señor.”
El Élder McConkie dijo: “El trabajo es la ley de la vida. No está bien pensar que tenemos el derecho de recibir sin trabajar. Debemos cuidar de nuestra propia salud, almacenar nuestros alimentos, educarnos y prepararnos para hacernos cargo de los asuntos diarios de la vida. Ninguna otra persona puede labrar nuestra salvación por nosotros, ni temporal ni espiritualmente.”
Si ponemos siempre a Dios en primer lugar en nuestras vidas, Él nos ayudará a proveer para nosotros, para nuestra familia, y para otras personas.